-¿Clara?-dije asomándome por la puerta de su habitación. No dijo nada pero se que estaba despierta, la había oído llorar, estaba segura. Entre en la habitación y despacio me senté sobre la cama, con cuidado. Después tanteé hasta que di con el encendedor de la lámpara de noche, lo encontré y lo pulsé.
-¡Coño! Clara que susto-le dije con una mano en el pecho. Al encender la luz, ya tenía los ojos abiertos y me miraba por eso me había asustado.
-¿Tan fea soy?-me dijo.
La verdad es que estaba horrible. Tenía los ojos hinchadísimos de llorar.
-¡Qué va! Estas tan preciosa como siempre, tonta.
Me tendió la mano y yo se la agarré fuerte mientras le sonreía, ella estaba seria.
-He pasado mucho miedo.
-Es normal cariño. Pero ya todo ha pasado-le dije acariciándole el pelo.
-Ya, pero es que cuando me arrastaba hacia el baño, pensé que...pensé...
-Pero no paso nada porque llego Zayn, el estaba allí y no hubiese dejado que te hubiese hecho nada-le dije sonriendo-antes le hubiese hecho un gancho de derecha, y otro puño, y un rodillazo en el estómago, mira así...-le dije levantándome de la cama e interpretándolo-Y después le hubiese tirado del pelo y le hubiese dado una patada en los hue...bueno tu ya sabes donde...-seguí dando puños y patadas al aire hasta que la sonrisita de Clara se convirtió en carcajada. Después me tire sobre su cama también riendo.
Cuando paró me dijo:
-Gracias.
-Mi Claritsel bonita-me abrace a ella. No se lo que hubiese hecho si ese hombre le hubiese hecho algo...-Anda, hazme hueco-La eche a un lado y me hice hueco en la cama-Toma-le tendí un casco y con la canción Save you Tonight, nos quedamos dormidas.
Narra Niall*
-Vamos a recogerlas y nos vamos a la playa, ¿qué os parece?-dijo Liam.
-¡Genial!-dije ya emocionado.
-No se yo...Clara quizás...-comenzó Zayn.
-Clara esta bien, que he hablado con Cristina y me ha dicho que esta más animada-le respondió Liam.
-¡Pues decidido! Poneros los bañadores chicos-grito Louis tirando rebañadas de pan por los aires.
-¡Que desperdicio!-grite yo intentando cogerlas al vuelo.
Todos corrimos a nuestra habitación y nos vestimos. Después cogimos el coche y nos fuimos a por nuestras chicas.
Por el camino me fuí comiendo las tostadas que había estado tirando Louis.
-¿Cuanto tardarán?-pregunto Zayn.
-Conociendo a Eleanor, déjame que piense-dijo Louis-una vida.
Todos reímos divertidos.
-¡¡Niall!!-mi sonrisa preferida fue la primera que salió por la puerta del portal. Yo baje rápido del coche y fuí a su encuentro. Llevaba una camiseta, pantalones cortos y unas chanclas. Llevaba un moño y nada de maquillaje...nunca la había visto más guapa.
-Ven aquí-le dije cariñoso. La cogí al vuelo por las piernas y ella me empezó a darme besos y más besos mientras yo reía.
-¿Cuanto tardarán estos en...?-oí que decía Lou bajito.
-Bien poco, creo yo...-le respondió Harry riendo.
Por suerte, Marta no parecía haberse enterado de la conversación poco adecuada de los chicos. Cuando la bajé me sonrió y con un movimiento de cabeza se bajó las gafas que llevaba en la cabeza, haciéndome reír.
Cuando entramos en el coche, Marta le fue dando besitos a todos...yo los mire mal y después les dije:
-No quiero volver a oiros hablar de ese tema, ¿estamos?-dije enfurruñado.
-¿Qué tema?-dijo Marta.
Todos se rieron pero a mi no me hacia ni pizca de gracia.
Narra Clara*
-¡Te queremos, amorcito!-le gritamos Cristina y yo a Ana que se quedaba en casita. Eleanor y Marta ya habían bajado y nosotras fuimos las más tardonas.
-¡Yo también! Decidle a Harry que lo quiero.
Cerramos la puerta y nos fuimos a encontrar con los chicos. Cuando Zayn me vio, se bajó rápido del coche. Se quedo parado y se rasco la cabeza, yo ande hasta llegar a su lado y lo abracé.
-Mi héroe-le susurré en el oído.
-Mi princesa en apuros.
-Ni se te ocurra llamarme así-le dije separándome-¡Que cursilada!
El me levantó en brazos y dijo:
-Si no eres la princesa, serás la rana.
-Prefiero ser una rana, antes que una princesa en apuros-dije removiendome hasta que me soltó. Después le revolví el pelo y me fuí corriendo, sabía que era peligroso hacer eso, pero me arriesgue.
-¡Ven aquí rana! Te voy a revolver yo a ti el pelo guapa-gritó, corriendo hacia mi. Cuando me pilló, me quitó la coleta y me desordenó el pelo, con lo que me costaba ponerlo en su sitio...tras mucho forcejeo, los dos caímos al suelo riendo y casi sin respiración.
-¡Chicos, por favor, no os pongáis durante más tiempo en ridículo, os lo pido!-dijo Louis.
Me da igual hacer el ridículo, comportarme como una cría o como una inmadura, siempre y cuando sea con mi héroe claro.
Narra Harry*
-Oye y, ¿dónde esta Ana?-dije buscándola con la mirada, era tan tardona...y tan mona...bueno esto no viene a cuento, pero es lo que hay, estoy enamorado.
-Arranca, no viene-le dijo Cristina a Liam.
-¿Cómo que no viene?-dije.
-Esta malita-me dijo Marta.
-¿Esta enferma? ¡Madre mía! ¿Y la dejáis sola? ¿Y si se pone peor? Parad, que me bajo.
-¡Que no tonto, Ana quería que vinieses! Además no es que este a punto de morirse-rodó los ojos Eleanor.
-¿Entonces?-dije confundido.
-Tiene...bueno...ya sabes...-dijo Clara, que estaba acurrucada al lado Zayn y estaba intentando colocarse la coleta, mientras Zayn se intentaba levantar el tupe.
-Aaaahhhhhh-dije entendiendo-Bueno me da igual, déjame bajarme que me quiero quedar con ella.-le dije a Liam.
-¿Estas seguro?-me dijo Liam.
-¡Pues claro! Prefiero estar con ella, antes que con 8 tontos-reí bajándome del coche-¡Pasaroslo bien!
Narra Liam*
-¿Vamos a la piscina?-preguntó desde la parte trasera Eleanor.
-¿Quién te crees que somos? Nos vamos a la playa, la piscina se queda demasiado pequeña para nosotros-rió Louis mientras le hacía cosquillas.
-Además de que la gente se echaría encima nuestra y moriríamos ahogados-dije yo, consiguiendo que todos riesen.
-Así que, os vamos a enseñar nuestra playa secreta, muy poca gente va allí, así que estaremos solos-dijo Niall.
-¡Nos lo vamos a pasar genial!-grito Marta, dando palmadas...y en ese momento...¡¡Puumm!!
-¿Qué ha pasado?-gritaron todos.
-Creo que...creo que hemos pinchado...-dije mientras conducía hacia el arcén.
-¿Qué hemos pinchado?-dijo Clara.
-Hace calor-se quejó Zayn.
-¡No os preocupéis gente! Yo se cambiar ruedas-exclamó entusiasmado Louis.
-Dios mío...nos quedaremos aquí toda la mañana-suspiró Cristina.
-¡Y tanto!-la apoyo Eleanor.
-¡Y encima sin comida!¡Estoy muerto de hambre!-gritaba Niall.
-Yo también tengo hambre...-dijo Marta.
Cuando pare en el arcén deje caer la cabeza sobre el volante.
-Madre mía...que dura es mi vida...
Narra Ana Maria*
-¡Que asco de verdad! Joo, como me duele...-hablaba para mi misma mientras rebuscaba en mi maleta-No me he podido dejar el Espidifen en casa, ¿y ahora que hago? A lo mejor hay en el baño...
Con tanto movimiento y ajetreo no oí como se abría la puerta del piso y alguien entraba en casa.
-¡Aquí tampoco hay nada!-grité desesperada.
-¿Qué no hay?
-¡Aaahhhh!-grite mientras me daba la vuelta con una mano en el pecho.
-Ui, lo siento, lo siento-rió Harry-¿Te he asustado?-me dijo mientras se acercaba a mi.
-¡Claro que me has asustado! ¿Qué estas haciendo aquí?-le dije.
-He venido porque como tu no ibas a la playa...me iba a aburrir sin ti-me dijo poniendo pucheros.
Me reí de su cara y le respondí:
-Yo quería que fueses y te lo pasases bien.
-Pues no puedo sin ti-me dijo sin darle importancia a lo que decía, pero mi corazón dio un vuelco y sonreí-¿Qué es eso que no tienes?
Madre mía...no quiero decirle que tengo eso que le viene cada mes a las mujeres...se que es una tontería, pero me da vergüenza.
-Nada, nada, una tontería-le dije moviendo una mano, quitándole importancia.
-¿Seguro? Parecía que lo buscabas muy desesperada...-me dijo sonriendo.
-Si, si seguro, no es nada importante...¡ay!-solté agarrándome la barriga, me ha dado un pinchazo.
-¿Estas bien?-me dijo preocupado.
-Si, no es nada.
-Ana, me voy a enfadar.
-¿Por?
-Ya se que tienes la regla. ¿Por qué te da vergüenza decírmelo? Tienes la suficiente confianza como para decirme eso y lo que sea.-me dijo serio.
-Lo siento, me daba vergüenza...además mi profesora de inglés en España, me dijo que cuando los ingleses te preguntan que tal estas, no quieren que les respondas sinceramente solo que le digas: ¡Bien!-le respondí hablando rápido. Cuando me viene la regla me pongo histérica.
Harry se quedo mirándome serio, con los ojos abiertos de par en par, y después empezó a reírse.
-¡Estas tontisima!-me dijo abrazándome tiernamente, después se separó y me miró fijamente-Y a mi me lo dices todo, todo, todo...Porque cuando yo te pregunto si estas bien y que te pasa, es porque quiero saberlo, no una fórmula de cortesía, ¿vale?
-Vale-le sonreí. El me devolvió la sonrisa y me dio un corto beso.
-Ahora vuelvo, voy a comprar algunas cosas.
Sólo estar con el un ratito me hacia feliz, me alegraba la vida de tal manera que se me había ido, incluso, el dolor de barriga.
Narra Eleanor*
-Pero vamos a ver Louis, ¿cómo piensas cambiar la rueda sin gato?-intentaba razonar con él, Liam.
-Pues...¿no podéis coger vosotros el coche a pulso?
-¡Tu estas chalado!-dijo Zayn.
Yo no pude contener la risa, este Louis mío...esta como una regadera...
-Yo estoy muy hambriento como para coger un coche a pulso-dijo Niall.
-¿Por qué no llamamos a alguien que nos ayude?-dijo Marta.
-¡Esta aquí!-grite emocionada. Mientras el resto charlaba, yo estaba buscando el gato en el maletero.
-¡Esa es mi chica!-me dijo Louis mientras lo cogía y me daba un pico-¿Y esto como se pone?-preguntó.
-¿Pero tu no sabías cambiar una rueda?-dijo Cristina desesperada.
-Se cambiar una rueda pero no poner un gato-le respondió.
-Voy a llamar a una grúa-dijo Clara cogiendo el móvil.
-No, espera, vamos a intentarlo-dijo Liam.
Tras mucho esfuerzo, entre la inteligencia de todos (bien poca) pusimos el gato y Louis se puso a cambiar la rueda, cuando:
-Aagggg me he manchado de aceite. ¡Qué asco! Límpiame Niall, límpiame-y salió corriendo a por el gritando y riendo, pero por el camino de Louis se cruzó Clara y sin querer la mancho entera.
-¿Qué haces Louis?-dijo apartándose de el, con todo la camisa llena de aceite. A Cristina se le escapó una risa.
-No se de que te ríes Cristina...¿a ti te gusta que te hagan esto?-dijo Clara acercándose a ella y dándole un abrazo. La mancho también a ella pero Cristina en vez de tomárselo mal, comenzó a reírse más fuerte y fue a darle un abrazo a Liam. Con la tontería todos nos empezamos a dar abrazos forzosos, riendo y gritando y acabamos llenos de aceite.
Cuando nos dolió la barriga de tanta risa y ya tuvimos la rueda arreglada, nos montamos en el coche y nos pusimos, de nuevo, rumbo a la playa.
Narra Harry*
-Ya he llegado-grité, entrando en casa.
Me encontré a Ana sentada en el sofá, con una sonrisa forzosa, no tenía muy buena cara mi estatuilla. Me acerqué a ella y le di un beso en la cabeza.
-Mira lo que te traigo-dejé la bolsa en una mesa cercana y me puse a sacar cosas-Chocolate, churrerías con mucha azúcar, compresas, no se sí son las que usas pero bueno...también te traigo pañuelos porque por mi madre y mi hermana se, que a veces os entran ganas de llorar sin razón, una película y...lo mas importante, ¡Espidifen!
Ana se levantó del sofá me dio un largo y apasionado beso que me quedó sin respiración. Después se separó un poquito de mi y me dijo:
-Eres un encanto, el chico que toda chica busca y no sabes lo afortunada que me siento al tenerte a mi lado.
Le sonreí y la volví a acercar a mi, quiero más besos.