CAPITULO 47 "Besos"

Narra Marta*

¿De qué iba la tía esa? He fingido como que no me importaba delante de Niall pero la verdad es que no me ha gustado nada sentirme tan observada y que la chica esa me grabase con el móvil. Pero bueno, supongo que será uno de los malos añadidos que vienen con un novio guapo, simpático y famoso.
-¿Nos vamos?-me dijo Niall sonriendo.
-Vale, ¿adónde vamos?-le pregunté yo levantándome de la silla.
-No importa, a donde sea, mientras que estés conmigo te lo pasarás bien, ¿no?-me dijo mientras abría la puerta del establecimiento y salíamos al exterior.
- Que creído te lo tienes...Eso te lo tendré que decir yo.-le dije riendo.
Niall me cogió por la espalda, levantándome en el aire y en el oído me susurro:
-Dímelo.
Tras lo cual, me dejo en el suelo. Yo me di la vuelta lentamente, le miré a los ojos y agarré su cuello con dulzura acercándolo a mi.
-Siempre que este contigo, todo será perfecto.
El me sonrió y me acercó a el agarrándome fuertemente por la cintura y me dió un beso, lento, apasionado... Cuando nos separamos mis piernas temblaban.
-Esa es mi princesa nerviosa.

 

Narra Ana Maria*

-¡Louis con cuidado!-le grité al mismo tiempo que me agachaba para que la pelota no me reventase la cabeza. Después levanté la cabeza y le miré indignada. El y Harry se reían pero cuando vieron mi cara se quedaron mirándome, tragaron saliva y se pusieron serios.
-¿Te ha echo algo, cariño? Eres un bruto Lou-le dijo Harry dándole con la raqueta en el hombro.
-Da igual que me hubiese echo daño, os seguirías riendo de mi-le dije enfadada. Y volvieron a irrumpir en risas los dos.

 

-Déjalos-me dijo Eleanor agarrándome por el hombro-¿Quieren guerra? Pues la tendrán.
Yo la miré y las dos nos sonreímos maliciosamente...

Narra Clara*

Tras las presentaciones iniciales, aquí nos encontrábamos los tres...Zayn, yo y su madre, Tricia. Ella le preguntaba que qué tal se encontraba, si quería volver a casa con ella por unos días, mientras yo seguía sentada en el sofá.
-Bueno hijo, pues entonces me voy a quedar aquí, lo que no voy a hacer es quedarte solo.-le decía Tricia a Zayn, tras la negativa de este de volver a casa con ella.
-Mamá, no voy a estar solo...
-No, ya veo que no...-le dijo Tricia con una media sonrisa y mirándome. Se me ruborizaron un poco las mejillas.
-Lo decía por los chicos, pero bueno también puedes tomarlo por ella.-dijo mientras Zayn sonreía-Bueno mamá que la estamos incomodando...
¡Por fin alguien se daba cuenta!
-Pues no, nada de no estar a gusto conmigo-dijo acercándose a mi-¿Qué os parece ir a comer? Porque te dan ya el alta, ¿no?
-Si, me dijeron que me podía ir hoy. ¿Qué te parece Clara?-me dijo sonriendo. En realidad, creo que hemos pasado de llevarnos bien, a ser novios. Creo que lo de ser novios se veía venir, en el fondo aunque me cueste reconocerlo sabía que íbamos a estar juntos o por lo menos que debíamos estarlo pero pasar de comenzar a salir a conocer a su madre...un poco precipitado, ¿no os parece? Pero ella parece amable y tan simpática como Zayn así que mi respuesta fue:
-Claro, me encantaría.
-Muy bien, Clara.-me sonrió su madre, con una sonrisa preciosa...tan preciosa como la de Zayn.

 

Narra Louis*

-¡Harry, dale, dale!-le grité, pero aunque lo intentó, no fue capaz de llegar hasta la pelota y rozó justo la línea. Harry se tiró al suelo rendido, yo bufé con la respiración entrecortada y mire a las chicas. Eleanor y Ana saltaban abrazándose y gritando que habían ganado el partido. Después de estar a punto de matar a Ana (casi sin querer) por la pelota esa que lancé y de que Harry y yo nos riésemos, las chicas empezaron a tomárselo en serio, y sin darnos ni un respiro nos machacaron. Yo también me tiré al suelo y observé a las chicas mientras se acercaban a la red donde se apoyaron y nos miraron con lástima.
-¿Queréis la revancha, preciosos?-nos dijo mi malvada mitad.
-¡Nooo!-dijo Harry que tenía los ojos cerrados. Después se incorporó y mirando a las chicas con desconcierto dijo:
-¿Por qué estáis tan bien? ¡No os habéis ni despeinado!
Las chicas rieron, yo también quería pero estaba muy cansado.
-Esto, para que no os volváis a reír de mi.-dijo la estatuilla.
-Nunca jamás, gordita-le respondió Harry volviendo a tumbarse.

Narra Liam*

-No me puedo creer que me hallas regalado un coche, y menos aún, ¡ese coche!-me dijo Cristina. Estábamos en un restaurante comiendo.
-Ya ves...-le dije sonriéndole.
-¡Es que es el coche de mis sueños! ¿Cómo lo has sabido? Me parece que nunca te he dicho que me gustase...-dijo con cara pensativa. Me encantaba su cara pensativa...el ceño fruncido, la boca torcida...me daban aún más ganas de besarla.
-Soy adivino-le dije riendo.
-Ya...¿Quién te lo ha dicho?-me dijo.
-Marta-los dos nos reímos-Un día estábamos los dos viendo una revista y salió un mini con la bandera de Londres, me miró seria y me dijo que era el coche de tus sueños, después me guiñó un ojo.

 

Tras reírnos un rato, vi que Cristina se ponía sería e incomoda.
-¿Qué te pasa?-le dije preocupado.
-Yo nunca podré hacerte un regalo, tan bonito...y caro como ese.
-No, tu me haces cada día un regalo mejor que ese, estar conmigo, besarme, abrazarme, escucharme, quererme tal y como soy-le acaricié la mejilla-¿Quieres hacerme un regalo tan preciado como el coche? Dame un beso.
Cristina rió con los ojos húmedos, supongo de la emoción; después se inclinó y me beso despacio, acariciándome el pelo y acercándome más a ella.
-Quiero otro coche por el próximo beso-me dijo riendo, después me volvió a besar. Todos los coches que quiera...

Narra Niall*

-¡Quiero las rosas, Niall!-me dijo Marta zarandeándome el brazo. Yo reí y señalándole al hombre las zapatillas rosas, Marta me dio un beso en la mejilla. Cuando ya los dos teníamos nuestras zapatillas, nos sentamos en un sofá y yo me las puse, mientras Marta intentaba desabrochar los cordones de las suyas, la graciosa que se las puso antes las había atado bien fuerte y le estaba costando desenredarlas.
-¿Sabes jugar a los bolos?-le dije.
-Un poco, la verdad es que no he jugado mucho...-dijo Marta con la lengua fuera de lo concentrada que estaba.
-Entonces te machacaré-le dije incorporándome tras haberme puesto ya las zapatillas.
-A lo mejor tengo la suerte del principiante...¡Por fin! ¡Las desenrollé!-dijo con los puños en alto. Yo reí, me levanté y le cogí la zapatilla que tenía sobre sus piernas, después me arrodillé en frente de ella y se la pusé.
-¿Será hoy la señorita mi princesa?-le dije. Ella se inclinó, dejando nuestras caras muy cercas.
-Yo lo seré siempre...pero la próxima vez, que mi príncipe azul llegue antes y me desenrolle los cordones de las zapatillas, para que no tenga que pasar apuros...
Me sonrió, con esa sonrisa que me deja más tonto de lo que normalmente estoy, y me dio un beso en la nariz.

Narra Eleanor*

-Ana, ¿has terminado ya?
-Salgo dentro de un momento...sal tu ya, si quieres...-me respondió desde dentro de su vestuario.
-Vale, pues me voy fuera que aquí hace calor-le dije. Después abrí la puerta y salí de los vestuarios. Tras jugar el partido y tomarnos algo en una cafetería que había cerca de las pistas, nos fuimos a bañar y arreglarnos a los vestuarios para después ir al cine. Yo ya había terminado pero Ana...es muy lenta.
Cuando salí, vi a Louis sentado en un banco. Me acerqué a el por detrás y le tapé los ojos.
-Eres mi mitad-dijo seguro.
-¡Has acertado!-le dije sentándome a su lado y besándole en la mejilla. El paso su brazo por mis hombros y achuchándome me dió un beso en la cabeza.
-Creí que eras Harry...-dijo riéndose. Yo le di un pequeño golpe en la barriga, lo  que hizo que se doblase de dolor.
-¡Mis agujetas!-murmuro bajito.
-Menuda paliza os hemos dado, ¡somos unas campeonas!-dije contenta.
-No me lo recuerdes, por favor...-dijo tapándome la cara con una mano.
-Es que te pesa el culo-bromeé.
-Es que lo tengo muy gordo-dijo mi mitad. Los dos comenzamos a reír y después nos besamos lentamente. Cuando nos separamos ambos teníamos una sonrisa radiante.